Desamor y alcohol. Mala combinación.

Deseando que llegue el viernes para poder salir de fiesta, encontrarse con los amigos, relajarse y como no, tomarse unas cervezas. Son momentos divertidos, o deberían serlos, pues como cada finde de semana empiezas a beber sin control, cerveza tras cerveza, hasta acabar con whisky o ron.

Tras unas horas en el bar tu cuerpo ya no piensa, simplemente actúa, te ríes sola, intentas mantener un conversación, pero es inútil, no eras capaz de razonar lo que dices. Tus ojos empiezan a cerrarse y que decir de tu cuerpo que apenas se mantiene en pie.

Me da pena ver como te destruyes, comprendo tu dolor, se que estas así por él, porque lo amabas y te abandonó, pero dime ¿merece la pena destrozarte por alguien que no te valoro?

He perdido la cuenta de en cuantas camas amaneciste, de cuantos hombres han poseído tu cuerpo diciendo "te quiero" para abrir tus piernas en vez de curar tu corazón. De las veces que has regresado llorando preguntado que fue lo que paso.

Ser tu pañuelo de lágrimas está empezando a ser agotador, te aprecio y te quiero como a una hermana, pero es hora de que me prestes atención. Deja de esconder ese dolor tan evidente, lucha por salir adelante por no perder el control, por disfrutar la fiesta sin necesidad de alcohol, y verás como un día, alguien se fijará en ti,
no como la chica "fácil" de la fiesta, si no como una mujer divertida y entusiasta. Esa chica que desde hace algún tiempo desapareció.

Tú, mi rubia de ojos claros.

Eres como una película de terror, me da miedo pero aún así necesito saber que va a pasar. Desde que te conocí quedé cautivo, preso de tu personalidad. Cada día nuestra amistad iba creciendo, me gustaba verte sonreír, pero odiaba el echo de que te burlarás de mí. Como un niño pequeño que molesta a la chica que le gusta porque no sabe expresar lo que siente.

Cada vez que nos abrazábamos podía sentir tu perfume, ese dulce afrodisíaco que solo me tentaba a morder tu cuello tan blanco como la nieve, perdón si alguna vez mordí demasiado fuerte, tenerte tan cerca, saborear tu piel, sentir el palpitar de tu corazón en mi lengua solo me hacían enloquecer, deseaba tanto hacerte mía...

Pero el miedo empezó a surgir en mi mente.. ¿y si no es solo deseo carnal?¿y si no eres un capricho? Que podía hacer, tenía miedo a enamorarme.

A veces intentaba sonreír para ocultar mi caos interno, pero contigo eso no funcionaba, sabías que algo andaba mal. Esos días en los que mi mundo estaba gris, empezabas a hablar de cosas que otros no sabían, como si en ese estado te estuviese mostrando una puerta que te permitía el paso por mi mente dejándome sin palabras... acobardado.. y con una única pregunta ¿como lo sabes?

Mi caos seguía ahí, pero no me importaba no podía parar de preguntar una y otra vez, dabas vueltas por mi mente constantemente, hasta que por fin caía rendido en la cama cediendo el paso a mis sueños. Pensando tontamente que no te encontraría en ellos, pero mas de una vez soñé contigo, sueños llenos de lujuria de un inmenso placer, el poder tenerte entre mis brazos el recorrer tu piel, ver tu rostro extasiado gimiendo de placer. Era un loco desesperado por hacerte enloquecer.

Volver a la realidad solo me hacía sentir miserable. Estaba a solas conmigo y era incapaz de poner en orden mis pensamientos, mi corazón se aceleraba cada vez que intentaba acercarme a ti, mis manos temblaban inquietas, cada vez que nuestras miradas se cruzaban me sonrojaba desviando mi mirada. Me odiaba con tanta fuerza cuando te marchabas. ¿Por qué no podía robarte un beso?¿Por qué me ponía tan nervioso? No es como si fuese mi primera vez, entonces... ¿por qué?

Sabía que tu corazón le pertenecía a otra persona, pero nuestros juegos, los roces, quizás me llevaron a la idea equivocada. En un impulso me confesé, fui capaz de reconocer que no eras solo un capricho para mi, me gustabas, pero jamás obtuve una respuesta de ti.

Acabe inquietándome y con el tiempo solo hallé una solución, como un perro asustado que huye con el rabo entre las piernas, me marché, me aleje de ti, tenía demasiado miedo de que mis sentimientos crecieran aún mas, de saber que es lo que sentías por mi...

En ocasiones, regresa tu imagen a mi mente haciéndome sonreír tontamente. Que puedo decir, eres como un agridulce recuerdo que a pesar de la distancia no podré olvidar. Aunque quién sabe, tal vez con el paso del tiempo pases a ser un recuerdo sin mas.

  

Quédate conmigo

Esa soledad que sentimos cuando alguien nos abandona, como nuestro corazón se comprime y nos ahogan las lagrimas sumergiéndonos en la tristeza.

Explícame tu que proclamas a los vientos que me has amado, que dices darlo todo por amor... ¿qué es el amor? Dime si no es estar al lado de la persona que te gusta, cuidarla, protegerla, consolarla, mimarla, y por encima de todo no ofenderle jamás. 

Si no es así dime.. ¡Dime que hice mal! Estoy cansado de excusas, de princesas que al besadlas se convierten en ranas, chicas que dicen buscar a su príncipe azul, un hombre romántico, bueno y divertido, que las trate como reinas, pero cuando ese "príncipe" aparece lo mandan a la mierda.

-Eres demasiado bueno para mí, te mereces algo mejor.

-Eres muy pegajoso, me agobias.

-No eres lo que estaba buscando.

Y sí, así es, merezco alguien mejor, no una mujer que me cambie por un chulo que la tratará como un juguete de usar y tirar, solo porque ese persona esta bien físicamente o es muy atractiva.

Hoy día le damos demasiada importancia al físico, y no nos ponemos a pensar que el físico es efímero, que en unos años nuestra belleza se contará en arrugas y cicatrices. Y sin darnos cuenta, hay personas que mueren por nuestro ideal de belleza este que está implantado ciegamente en la sociedad. 

Se que debemos llevar una vida sana y hacer ejercicio, que ponemos millones de excusas a la hora de cuidarnos nosotros mismos, pero no veo mal una persona que tenga su barriguita o este entrado en carnes (sin llegar al sobrepeso, y digo lo del sobrepeso, porque jode no poder sentarse en el bus, en las butacas de los cines, que te miren mal cuando paseas por la calle, pero sobretodo porque te cansas al subir una cuesta, te ahogas, y muchos problemas de salud que conlleva la obesidad).  

Pero lo que mas lástima me da, es ver como personas se destruyen poco a poco, que dejan de comer porque se ven gordas, llegando al extremo de estas en los huesos y seguir sin comer porque se siguen viendo gordos e incluso mucho mas que antes. 

TENEMOS QUE ABRIR LOS OJOS. 

No podemos esperar a perder a una persona por estos motivos y tampoco recriminar a la sociedad. Déjame ayudarte no quiero perder a un ser querido, no quiero estar sumergido de nuevo en la soledad...

¡ABRE LOS OJOS! ¡PIENSA! ¡RECAPACITA!

Y para ti.. ¿Que es la libertad?

Pedimos libertad, pero... ¿Qué es en realidad la libertad? 

Somos seres atados a una ilusión, a un sueño, a una simple teoría que nos permita avanzar sin quejas y obedientes. Desde que nacemos estamos marcados por la economía que nos brinde nuestra familia, nuestros estudios nos permitirán elevarnos de estatus, pero si no hay dinero para pagar esos estudios ¿como consigues un buen trabajo?¿como luchas por salir de la miseria? O simplemente como ayudas a tu familia, aquella que desde que tú eras pequeño trabajo sin descanso para que pidieses estudiar. 

Países ricos en pobreza, donde enriquecen a los ricos y hacen más pobre al desvalido. Un lugar donde hay políticos por doquier, cobrando el triple de un sueldo mínimo exigido para aquel que menos tiene, y encima son ellos los que (aún me pregunto como) no tienen estudios (y están en esos cargos).

Un país que va directo al desastre, gente que se alza buscando clemencia, pidiendo a gritos una salida de está oscuridad. (Y pongo oscuridad, pues nuestros amados políticos no tienen otra maravillosa idea para salir de la crisis financiera que subir los impuestos al pobre. Aquel que ya se le hace difícil llevarse un trozo de pan a la boca y que dentro de poco acabará comiendo a la luz de las velas.) Y lo único que obtiene son sanciones y leyes que prohíben su derecho a dar su opinión, su derecho a luchar por un país menos corrupto, su derecho a vivir en una vivienda digna, etc... ¿Cuántos derechos les habrán robado solo por mantener el orden que ellos creen correcto?

Si algo positivo tiene este gobierno, es que está consolidando al pueblo unidos por una misma lucha: 

SUS DERECHOS, SU IGUALDAD, SU LIBERTAD.

Y tú ¿Quieres un chupito?

¡Necesito una copa!-se dijo a si misma mientras se fumaba un cigarro en la ventana. Aprovechando el fresco de la noche, decidió salir a pasear por la playa y disfrutar de ese aroma tan peculiar que trae consigo la estación de verano.
A solas con su tristeza vagaba por la orilla  refrescándose los pies con los olas, olas que inconscientemente la sumergían en sus pensamientos, esos mismos pensamientos que ella deseaba olvidar. Cansada y melancólica acabó en uno de los pubs de la zona bebiendo whiskys y algunos chupitos cortesía de la casa, su tristeza parecía evadirse tras cada sorbo nublando a la vez su mente...

El sonido de los pájaros daba comienzo a un nuevo día, aturdida y desorientada miraba a su alrededor para saber donde se encontraba. Su mirada quedó fija en sus piernas y en sus pies descalzos teñidos de sangre, sus ropas estaban rasgadas y su cuerpo magullado. Derrepente su mente entró en shock al intentar recordar que había pasado, todo se oscurecía tras el último chupito que le acercó "alguien" en la barra, lágrimas brotaban de sus ojos mientras su cuerpo temblaba. Tras mirar atentamente se dió cuenta que estaba en la puerta de casa y a duras penas consiguió levantarse para poder entrar.

A su paso huellas semi-ensangrentadas recorrían el pasillo hasta llegar al baño. Fue allí, cuando al verse reflejada en el espejo su mundo terminó de hacerse pedazos, rasguños cubrían sus mejillas, moratones recorrían su cuerpo, incluso alguna que otra mordida la marcaba.
El cristal que la reflejaba se hacía pedazos en su mente mientras gritaba sin decir palabra. Y no era poco el dolor que sentía que el alcohol que aún permanecía en su cuerpo se desvanecía y con el su efecto sedante.
Sin saber que hacer se arrastró hacía la ducha y allí acurrucándose bajo el agua se quedó mirando como la sangre se iba por el desagüe. Sin más lágrimas que poder soltar soló encontró una salida para acabar con la pesadilla que estaba viviendo. Pastilla tras pastilla vacío la caja de antidepresivos, pero eso no le parecía suficiente...

Un mar de sangre cubría el suelo mientras el cuerpo yacía inerte en la habitación, pues había dado fin a su tormento con una de las cuchillas que encontró.

En reformas

Mis mas sinceras disculpas a aquellas personas que encuentren el blog en un estado tan pésimo, pero lo he creado sin una base de la cuál partir y aún hay confusión en su temática.

Espero pronto poder crear mas entradas una vez obtenga las palabras adecuadas para su composición.

Un saludo. Gracias.